Translate

jueves, 3 de mayo de 2012

Siempre Coca Cola

¿Por qué ese empeño en que bebamos Coca-Cola Zero en vez de la Coca-Cola de toda la vida? ¿Por qué compararlas una y otra vez? ¿Por qué enfrentarlas así? 

Coca-Cola quiere que confiemos en su versión sin azúcar pero creo que con su campaña "El cambiazo" se está equivocando.


La marca quiere jugar con nosotros. La primera vez fue divertido. Nadie se podía imaginar que en el cine iban a dirigirse a nosotros desde la pantalla y que dentro de nuestra Coca-Cola encontraríamos por sorpresa una Coca-Cola Zero:


"A la salida, invitándoles a otra Coca-Cola, el 43% de los espectadores pidió una Coca-Cola Zero". En pleno lanzamiento está bien destacarlo, pero han vuelto a hacer de menos a  la original y siguen haciendo uso del recurso de la oscuridad. Esta vez ha sido en un restaurante (Dans Le Noir?), donde los invitados tenían que averiguar qué comían:


"¿Para beber?", pregunta el camarero. Escuchamos claramente que algunos piden Coca-Cola. Una vez terminada la comida van, plato por plato, resolviendo incógnitas. "¿Qué habéis bebido?", vuelve a preguntar. "¡Coca-Cola!",  responden una vez más. "¿Y si os digo que habéis bebido Coca-Cola Zero?"


"¡Qué fuerte!", exclaman entre risas. Desde mi punto de vista, me parece muy forzado y poco sorprendente. Me gusta la actitud de experimentar y de hacer partícipe al consumidor, pero no considero apropiado ni necesario ese desplazamiento de la marca original. Cuando dentro de una marca, existe una variada línea de productos, éstos se deben respeto unos a otros, así como a los distintos consumidores que hay detrás de ellos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario